Realmente algunos creen que jugar es perder el tiempo porque se debe trabajar, trabajar y trabajar, bueno es cierto que debemos como padres trabajar para llevar el sustento… pero también es cierto que debemos sacar más tiempo para la diversión.
Pero si perdemos el tiempo más seguido, ¿que tal nos quede gustando y veamos que la vida no deba ser tan seria como creemos o solemos creer?…
Debemos recordar que la vida es solo una, un tiempo que nos dan, una oportunidad para crecer, para vivir y divertirnos. Donde quienes tenemos hijos encontramos esos aliados que estamos formando para que algún día llegue el día vuelen, así como nosotros lo hicimos algún día.
Si podemos acompañarlos en este proceso es maravilloso y mágico, realmente no sabemos cuántas fichas nos quedan para jugar, pero tampoco jugar desde el miedo, sino desde el corazón – disfrutando cada escalera y el peldaño que ellos suben, junto o sin nuestra ayuda.
Disfrutemos el proceso de crecer juntos, de vivir el día a día. Si el juego de vivir se nos acaba en algún momento, que dejemos también grandes recuerdos, enseñanzas, añoranzas, diversión en cada uno de los corazones.
Vivamos como niños también, veamos que la vida no debe ser tan dura y solucionemos como lo hacen ellos. Realmente conectémonos con nuestros hijos y perdamos mas el tiempo con ellos. ¿Quiénes nos van a extrañar si se nos acaba la ficha en este mundo?
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